La introducción

Este primer apartado imprescindible del TFG es una ayuda para que la persona que lee o consulta el trabajo sepa qué es lo que se va a encontrar en él. Es importante escribirla al principio como guía, pero volver sobre ella al final, para redondearla, ajustar las incoherencias que queden y tener bien presente que será lo primero que lea el tribunal.
Es necesario en ella presentar brevemente el tema, los objetivos —pueden presentarse en forma de preguntas de investigación—, la metodología empleada y la estructura que tiene el trabajo. La introducción se redacta mejor con formas verbales conjugadas en tiempo presente.
 
Cómo se redacta la introducción de un trabajo académico, por Alberto Bustos (vídeo de 13:24 min)